El otro día me contaba mi vecina Rosa, que Andres Delaprosa esta infectado con el virus de la rima, que el pobre no puede pronunciar ni una sola frase sin darle a la segunda la misma terminación que la de antes; como mucho le confiesa que los días que se encuentra algo mejor, aguanta hasta la tercera , pero el esfuerzo hace imposible evitar que la cuarta no rime con la primera. Lo peor del caso es cuando le agarra un ataque de ordinarius pareadus, pongamos en el metro por ejemplo, me cuenta como la deja en evidencia delante de los pasajeros, completamente perplejos, que le ruegan que deje de atormentarlos con esa especie de boleros sin final, en un formato parecido al rap.
Señor revisor , me infunde usted pavor, de no tener ticket me acusa, déjeme que le explique que no es ninguna excusa, que a mi voraz apetito es debido, que en la anterior parada, me lo he comido! ....
